Una guía para su comprensión y acompañamiento terapéutico
1. ¿Qué es una experiencia faltante?
La experiencia faltante es una vivencia emocionalmente nutritiva y positiva que no pudo ocurrir en el pasado debido a condiciones relacionales adversas, y que tampoco puede vivirse plenamente en el presente por la forma en que la persona organiza su experiencia actual.
No se trata solo de una carencia histórica, sino de algo que hoy sigue siendo inaccesible a pesar de estar disponible. Esto ocurre por la persistencia de creencias limitantes, hábitos automáticos de gestión y una organización somática que filtra la realidad a través del pasado.
Ejemplo: Alguien que nunca fue sostenido emocionalmente podría rechazar el apoyo actual sin darse cuenta, o asociarlo con debilidad.
2. ¿Por qué ocurre?
La persona ha internalizado una visión del mundo y de sí misma que le impide recibir experiencias que no encajan con esa antigua narrativa. Puede que:
- No crea que esa experiencia sea posible (“nadie me va a apoyar”).
- No crea merecerla (“no soy digna de amor”).
- O la confunda con algo negativo (“si me ayudan, es que soy débil”).
En muchos casos, se trata de una profecía autocumplida: como no se espera ni se conoce ese tipo de nutrición emocional o experiencia, o no se reconoce o ni se permite cuando llega.
3. ¿Cómo se manifiesta en el presente?
Hakomi se basa en la observación del presente, trabajamos fundamentalmente con la experiencia presente. Por eso, buscamos detectar qué experiencia emocionalmente nutritiva no está ocurriendo ahora.
Esto se revela a través de:
- Conductas inconscientes.
- Creencias automáticas.
- Y, sobre todo, el lenguaje del cuerpo: posturas, microgestos, tensiones, reacciones.
La experiencia está organizada corporalmente. La postura y el tono corporal contienen más información que las palabras. El cuerpo es contenedor de nuestra historia.
4. La vía de acceso: el cuerpo y el mindfulness
Hakomi nació como una psicoterapia “centrada en el cuerpo” porque el cuerpo muestra de forma directa cómo se está organizando la experiencia.
El trabajo terapéutico se apoya en:
- La atención plena (mindfulness) como vía para observar sin juicio.
- La organización somática actual como puerta de entrada a la experiencia y a creencias nucleares, memorias implicitas, habitos, patrones etc..
- La reacción del cuerpo ante nuevas experiencias potencialmente nutritivas emocionalmente, experimentos.
Al ofrecer un nuevo input interno a nivel del sistema nervioso y en lo relacional desde presencia, ternura y seguridad, el sistema nervioso puede reorganizarse.
5. ¿Cómo se crea una experiencia faltante?
El terapeuta puede facilitar momentos cuidadosamente diseñados para que la persona reciba lo que no ha recibido antes, como:
- Paciencia sin juicio.
- Mirada amable.
- Aprobación espontánea.
- Contacto respetuoso.
- Silencio nutritivo.
Estos momentos deben ser:
- Sencillos pero significativos.
- Sentidos profundamente en el cuerpo.
- Sostenidos con atención plena.
“Puede bastar con cinco o diez minutos para que abra nuevas posibilidades.”
6. Neurobiología de la experiencia faltante
Cuando el cliente revive antiguos esquemas emocionales (como memorias de rechazo o abandono) y recibe una nueva experiencia emocional en ese mismo contexto activo, se abre la posibilidad de transformar la memoria.
Este proceso:
- Activa el sistema límbico (vinculado a vínculo y emoción).
- Crea un marcador somático positivo para el futuro.
- Genera un cambio profundo, porque el cuerpo siente que esto es real y diferente.
“As the new experience is deeply felt and embodied, it becomes nourishing and transformative.”
7. Lo agridulce del momento transformador
Recibir lo que una vez faltó puede generar una mezcla paradójica de:
- Alegría por lo recibido.
- Dolor por lo que no se tuvo.
El terapeuta debe sostener este umbral con mucha delicadeza:
- No intentar reparar rápidamente.
- No racionalizar lo que ocurre.
- No ofrecer explicaciones ni consuelo prematuro.
“Working through is never rushing through.”
La transformación ocurre en el borde mismo de la defensa, con presencia y sin violencia.
8. Rol del terapeuta Hakomi
El terapeuta no es un “experto que arregla”, sino un compañero sensible y atento que:
- Acompaña desde la ternura y el respeto.
- Honra la soberanía del cliente.
- Detecta momentos propicios para ofrecer nutrición emocional.
- Está presente como un ser humano con otro ser humano.
“El terapeuta con éxito no es neutral, sino amoroso, compasivo y cálido.”
9. Criterio de éxito: gozo y placer auténtico
Lo que indica que una experiencia faltante ha sido verdaderamente integrada es que:
- La persona siente gozo o alivio real.
- La experiencia evoca buenos sentimientos en lugar de ser rechazada por hábito.
- La nutrición emocional puede ser recibida y disfrutada plenamente.
10. Conclusión
El trabajo con la experiencia faltante es uno de los ejes más potentes y delicados del método Hakomi.
Permite a la persona reencontrarse con algo esencial que quedó incompleto.
Y cuando se ofrece desde una presencia cálida, respetuosa y encarnada…
el sistema entero puede reorganizarse para abrir paso a una vida más plena, flexible y libre.
Método Hakomi 